¿Qué es un parque canino o zona de esparcimiento para perros?
Tiene diferentes denominaciones: área canina, zona de esparcimiento para perros, zona recreativa, parque canino… pero todas ellas se refieren a lo mismo: un espacio público destinado a que los perros cubran determinadas necesidades como socializar, realizar ejercicio, pasear sin correa… todo ello en unas buenas condiciones de salubridad y seguridad.

¿Qué condiciones debe cumplir un parque canino?
- Vallas lo suficientemente altas para que ningún perro las pueda saltar: lo ideal serían vallas de mínimo dos metros de altura (aunque hemos visto perros saltar esta altura, no es lo frecuente).
- Puertas de seguridad dobles: de esta forma la salida y la entrada en al área canina se realizará con mayor seguridad. Además permitirá gestionar mejor el contacto entre dos o más perros en estos puntos en los que pueden surgir conflictos debido al poco espacio.
- Fuentes de agua adaptadas para perros (y también para humanos).
- Papeleras y dispensadores de bolsas en todo el parque canino.
- Espacio de esparcimiento amplio: este es uno de los puntos más importantes y quizá el más incumplido en las áreas caninas de nuestro país. Se trata de que los perros puedan pasear libres en un recinto amplio. Además el espacio es fundamental para las buenas relaciones sociales entre perros. Sin este espacio, no tendrán la posibilidad de gestionar las interacciones, los saludos, los conflictos o el juego, aumentando la probabilidad de conflictos. Cabe decir que en un “paseo ideal” el perro no debe estar constantemente “jugando” con otros perros. Lo idea es ir paseando, que se encuentre con perros, interactúe, se distancie, continuemos el paseo… Las medidas deben ir también en función de la afluencia de perros, pero podríamos hablar de un mínimo de 2000 m² para un parque poco frecuentado. 5000 m² sería un buen espacio en la mayoría de los casos.
- Vegetación abundante: plantas y árboles son realmente importantes para los perros y no sólo por la sombra que proporcionan. El olfato es el sentido más poderoso de los perros y, a través de su estimulación, enriquecemos enormemente su vida. Además, estos olores generan diferentes puntos de atención que ayudarán a evitar posibles conflictos. Si introducimos a un grupo de perros en un entorno más o menos reducido y sin elementos que puedan distraerlos, todo el foco se pondrá entre los perros. Y aunque estos perros sean los más sociables del mundo, después de un buen rato interaccionando es posible que surjan conflictos. En un estado natural, los perros utilizan elementos como la vegetación para redirigir la atención y bajar la intensidad de estas relaciones sociales evitando así posibles tensiones.
- Otros elementos ambientales: rocas, zonas de arena, caminos de corteza, desniveles, etc. Hay un sinfín de posibilidades para enriquecer la estancia de los perros y ayudar a unas relaciones sociales más fluidas.
- Un estanque o charca debidamente cuidada. Ya no solo por refrescarse, muchos perros ante una situación tensa utilizan el agua como un “espacio seguro” que ayuda a rebajar esa tensión. La existencia de un estanque atajaría muchos posibles problemas entre perros.
- Bancos para que los humanos puedan descansar, aunque recordamos que no es recomendable estar quieto mucho tiempo; los perros tendrán mejores relaciones sociales si estamos en movimiento, por ejemplo paseando por el parque para perros.
- Buena iluminación: que haya alumbrado correctamente situado es fundamental, especialmente en invierno.

En mi barrio han abierto un “pipican” ¿es lo mismo?
Rotundamente no. Los pipicanes son algo nefasto para los perros. Son un punto de conflictos sociales y contagio de enfermedades. Hay varios motivos:- El espacio tiende a ser realmente limitado: los perros utilizan muy a menudo la distancia espacial para gestionar tensiones, por ello, esta limitación del espacio inevitablemente lleva a que la intensidad de las relaciones vaya subiendo sin tener espacio ni elementos que les ayuden a distraerse o a rebajar dicha tensión. Ante una situación de conflicto, suele haber dos respuestas: huída o confrontación. Si los perros carecen de la opción de “huir” debido a lo limitado del espacio del pipican, sólo les quedarán dos opciones ante un conflicto: congelarse o responder.
- La acumulación de heces y orines así como el elevado número de perros hace que se conviertan en un foco de enfermedades.
- Las vallas suelen tener una altura de medio o un metro, altura que gran cantidad de perros pueden saltar. Ante situaciones de estrés o problemáticas un perro fácilmente podrá huir con el consiguiente problema tanto para él/ella, su guía como para el resto de viandantes.
- El dinamismo ayuda a las relaciones sociales entre perros: estar en movimiento, caminando, ayuda a los perros a relacionarse entre sí ya que van apareciendo nuevos estímulos que captan su atención. También les permite gestionar mejor los niveles de energía al relacionarse. En un pipican esto es inviable, ya que no hay espacio físico para ello.
- Se produce bullying: sí, existe en perros. Y en los pipicanes tiende a darse cuando un perro (y más si es algo inseguro) entra estando ya un grupo de perros dentro. Todos irán a “saludarle” de golpe siendo una situación enormemente invasiva para el perro que acaba de llegar, pudiéndose producir situaciones de huida o agresión. En ocasiones, un perro inestable que no sabe gestionar adecuadamente las interacciones con sus congéneres, puede generar situaciones conflictivas ante los que los demás no tienen capacidad de evadirse.

Elementos de agility en el parque canino
Con frecuencia en pipicanes y parques para perros podemos encontrar elementos como túneles, rampas, empalizadas y otros objetos. No son nada más ni nada menos que obstáculos de Agility, una disciplina deportiva canina practicada en todo el mundo. Pero, ¿es recomendable que se instalen estos elementos? En muchas opiniones, incluida la nuestra, no; como puedes ver en este artículo de nuestros amigos de Sr. Perro, también veterinarios y/o etólogos creen que puede ser contraproducente. Aquí te explicamos el por qué según nuestro punto de vista:- El agility es un deporte de competición y como tal requiere de unos conocimientos y de una preparación física del perro.
- Los obstáculos que encontramos normalmente no respetan las normativas de las competiciones lo cual puede confundir al perro si algún día llega a competir.
- Además estos elementos no cuentan generalmente con las medidas de seguridad y materiales adecuados para el bienestar del perro pudiendo ser lesivos para estos.
- El desconocimiento del uso de estas pruebas y la ausencia de una preparación previa en el perro pueden desembocar en lesiones, desde leves como una torcedura hasta tan graves como lesiones de columna y/o articulares.
- El acceso a las instalaciones de agility debería estar limitado para que solo haya un perro trabajando. El hecho de que un perro esté realizando una prueba y otro vaya a interactuar con él puede desencadenar en un accidente o un conflicto.
- El uso de estos obstáculos en un área canina debería estar supervisado por un profesional de la educación canina que conozca a fondo la disciplina Agility.

Beneficios de un parque canino para el perro
- Un entorno adecuado para la socialización tanto con otros perros como con humanos.
- Un área de esparcimiento para perros donde poder enriquecer su día a día con nuevos olores y experiencias.
- Amplias zonas donde un perro inseguro puede alejarse de otros para evitar tensiones.
- Relaciones de calidad y en movimiento.
- Posibilidad de desplegar toda su capacidad comunicativa: el lenguaje de los perros tiene un gran componente visual, pero para emitir determinadas “señales”, un espacio físico muy limitado o el ir atado puede hacérselo complicado.
- Posibilidad de pasear sueltos.
Beneficios de un área para perros para el guía
- Disponer de un espacio adecuado donde satisfacer muchas de las necesidades etológicas de tu perro.
- Un lugar donde poder trabajar de forma segura señales como la llamada, que mejorarán la respuesta del perro cuando el guía le pida algo.
- Poder llevar a tu perro suelto (siempre con responsabilidad).
- El parque para perros o área canina es un espacio de socialización no solo para el perro, también para los humanos. Un lugar donde compartir intereses con otros de una forma saludable.
- Personas de avanzada edad encontrarán un lugar donde poder soltar a su perro para que pueda correr libre sin riesgos de que se escape o asuste.
Beneficios de un parque canino para la sociedad
- Uno de los grandes problemas de hoy en día respecto a los perros es la mala socialización de estos. Cada vez vemos más por las calles perros reactivos o con diversos “problemas de comportamiento” cuyo origen está en esa mala socialización. Por otro lado, el vivir en un entorno donde no pueden satisfacer muchas de sus necesidades etológicas, también lleva a que surjan muchos problemas. Un área canina aportará perros más sociables y equilibrados lo que inevitablemente mejorará la convivencia con el resto de ciudadanos.
- Se evitará en gran medida que perros vayan sueltos en lugares en los que está prohibido, ya que habrá un lugar específico para ello: el parque canino.
- Se reducirán en gran medida los ataques de perros a personas u otros perros ya que aumentará la calidad de vida de los animales, sus necesidades sociales y se reducirá su estrés.
- El disponer de una zona específica para perros aliviará la carga del resto de parque de la zona, que no se verán tan frecuentados por los cánidos y el desgaste que ello conlleva.
Consejos para usar un parque canino o área de esparcimiento para perros
- Este espacio no sustituye los paseos por el monte o el campo, no dejes de hacer excursiones con tu perro.
- Dale un pequeño paseo a tu perro antes con el objeto de que entre más relajado.
- Respeta a los otros usuarios: Si tu perro está siendo invasivo con otro o le está agobiando, átalo y llévale a otra zona del área para perros. Si tu perro tiene conflictos con otro perro habla con su guía y acordad avisaros cuando vayáis a utilizar el espacio para no coincidir.
- No utilices comida en el área canina: quizá tu perro no tenga problemas para compartir su comida, pero muchos otros perros sí. Deja los premios guardados en una bolsa hermética y evita que los huelan.
- Los juguetes, en grupo, mejor no. El área canina es un espacio de socialización y esparcimiento. No pasa nada porque lleves juguetes para utilizarlos con tu perro pero si aparece otro lo más recomendable es que los guardes mientras estén interactuando. No sabes si el otro perro puede tener un problema de protección de recursos o ser obsesivo con determinados juguetes. En cualquiera de los casos, lo único que consigues es cortar su interacción.
- Pasea, no te quedes quieto. Es frecuente ver en los parques pandillas de perros con sus guías quietos charlando. En esta situación la interacción de los perros frecuentemente incrementa su intensidad. Al no estar en movimiento no hay nuevos estímulos con los que puedan ir distrayéndose y reduciendo dicha intensidad, siendo habitual que se produzcan conflictos. No nos cansaremos de repetir que el movimiento ayuda mucho a la gestión de las relaciones sociales entre perros.
- No acaricies a ningún perro desconocido sin preguntar antes a su guía. Hay perros que si bien es posible que no hagan nada, no disfrutan de las caricias de un extraño e incluso pueden asustarle.
- Si vas con niños, explícales como deben comportarse con los perros.
- Vigila los niveles de estrés de tu perro y si ves que está subiendo vete del parque o muévete a una zona más tranquila.
- Si convives con un cachorro procura que las interacciones con otros perros no sean demasiado largas y siempre con perros equilibrados.
